Siempre me quedé con la duda
de lo que me dijiste aquella ocasión;
¿En realidad te querías casar conmigo?
¿O fue sólo despecho por haberte peleado con el otro?
Mi corazón te contestó de inmediato que sí.
Lástima que estaba mi ego de por medio
para echar a perder un amor futuro.
Que ironía! Yo que tanto leo y escribo del egoísmo,
el destino me puso en una situación explícita
para evidenciar “My own motherfucking ignorant ego!”.
Y tengo otra duda que nunca me pude contestar yo mismo:
¿Me enamoré de tí ó de tu belleza física?
Si se pudiera contestar por el “¿Cuanto te extraño?”
La respuesta sería que de ambas……Demasiado tarde.
Te deseo lo mejor dondequiera que estés.
y si llegas a leer esto,
piensa que nunca existí y que solo tuviste un mal sueño,
de un hombre y su batalla intrínseca entre el ser y el parecer.
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